Santa Ageda

bideobuttom partituraButtom

14Las coplas de cuestación han sido muy conocidas en Euskal Herria, principalmente en Hegoalde, en el sur. En las provincias del norte, en Iparralde, aunque en un tiempo sí que fueron también muy populares, en la actualidad podríamos decir que no lo son tanto.

Así como ocurre en otras muchas fiestas populares, esta actividad se practicaba en vísperas de la festividad de la santa, es decir, el 4 de febrero.

En las salidas de ronda de Santa Águeda, el modelo de copla de cuestación que prima es el general: esto es, el coplero que encabeza la agrupación de jóvenes, canta una copla y el grupo la repite.

Esta canción relata la vida y muerte de Santa Águeda. Se compone de una selección de letras y melodías popularmente conocidas en distintas comarcas de Bizkaia.

Respecto de la lengua, frecuentemente se confunden el dialecto vizcaíno y el guipuzcoano, en la mayoría de casos debido a que eran coplas que habían sido compuestas por alguien.


Santa Ageda
Bizkaia

1.
Santa Águeda, Águeda,
mañana es santa Águeda,
siendo mañana santa Águeda
es hoy la noche de la víspera.

2.
Solicito su consentimiento
al propietario de la casa
pues la alabanza a santa Águeda
me dispongo a cantar.

3.
En un palacio de Catania
una bella flor nació,
y al rey que en Palermo residía
dicha flor le gustó.

4.
Pero esa rosa
no fue creada para Quinciano,
en las alturas del cielo moraba su esposo
nuestro Señor Jesucristo.

5.
El emperador ha decretado
pena de castigo,
para que quien de ella se apiade
sea decapitado.

6.
Los soldados recibieron la orden
de azotarla en la plaza,
y de que si después no renegaba
los pechos le cortaran.

7.
Si ante el amo Emperador
ella se arrepintiera,
perdería su cristianismo
por más que le doliera.

8.
Santa Águeda les respondió:
—No siento miedo alguno,
vuestros ídolos de falsos dioses
no me gustan en absoluto.

9.
Al oírla los malvados gentiles
la sujetan en el sitio,
para cortarle a cuchillo
sus pechos allí mismo.

10.
Entre llantos de tristeza
con los pechos de cuajo cortados,
al calabozo fue llevada
en una silla atada.

11.
No hubiera podido vivir
si la gracia no la iluminara,
¿quién ha visto alguna vez
tamaño milagro?

12.
Cuando esta santa fue apresada
ocurrió un gran milagro,
pues desde los cielos descendió hacia ella
la luz de Dios.

13.
Las penalidades de la muerte
en absoluto la acongojaban,
puesto que las grandezas del cielo de las alturas
le eran conocidas.